Reseñas:

08 abril 2015

Mi biblioteca en papel


Como habréis visto, hace unos días subí una entrada comentando los dos libros que me había comprado. No os preocupéis, tengo más. He de decir que no tengo demasiados que me guste enseñar, así que sólo voy a enseñar los que tengo en primera fila. También quiero añadir que leo más libros en eBook que en papel, para mi desgracia. ¿Qué se le va a hacer si la cultura es demasiado cara?

El primero del que voy a hablar se llama "Divergente", no sé si lo conoceréis. Es de Veronica Roth, como muchos sabréis. La primera parte de esta saga me encantó, y vi la película y estaba bastante bien adaptada (dentro de lo que cabe). Ya la segunda parte no sé...la leí con un poco de desgana, y puede que la retome, porque he visto el estreno (en España fue el miércoles 1 de abril) y me gustó. Cuando no tenga nada que leer la pillaré de nuevo, a ver si me acuerdo. Supongo que haré una reseña de Divergente, pero no me corre prisa. Me la tendría que volver a leer para acordarme de cuánto me gustó y todo, y de momento estoy bien con los libros que me estoy leyendo.

 


El siguente es "Cazadores de sombras: ciudad de hueso", y su autora es la conocida Cassandra Clare. Tuve una temporada en el que estaba completamente obsesionada con esta saga. Sólo con deciros que me regalaron el primer tomo en Nochebuena y me regalaron el quinto para la noche de Reyes creo que os lo digo todo, ¿no?
Esta saga sí que me la volvería a leer, básicamente porque creo que no me he leído el último, y eso es pecado. Quiero volver a visitar el mundo de Cazadores de sombras, y sé que me gustará tanto como la primera vez que me los leí. Pero, como para releer siempre estamos a tiempo, la dejaré para más tarde también.
 
 


Siguiendo en ésta línea, llegamos a "Cazadores de sombras: ciudad de las almas perdidas", el quinto libro de la saga y creo que el último que me he leído. Veo las portadas y me enamoro, en serio. ¿Por qué son tan bonitas? Oh, dios, y lo que no me gustó para nada fue la película. Hace "poco" me enteré de que iban a hacer una serie y estaba que ni tocaba el suelo de la felicidad. Mi mejor amiga también está enganchadísima a esta saga, y estamos esperando ambas a que saquen el libro de "Las crónicas de Bane" (es así, ¿no?), que es una novela con mini-historias dentro que van sobre el mago Magnus Bane. Lo sacaron en inglés en noviembre de 2014 si no me equivoco, y no suelen tardar tanto en traducir (o sí, que no lo sé). Estamos impacientes :)

Después de una saga, viene un libro que ni siquiera me he leído. Se llama "La última lágrima", de Lauren Kate, la escritora de "oscuros", que tampoco me la he leído. Me regalaron este ejemplar mis padres por Navidad, y nunca me ha dado por leerlo, no sé. Puede que no me llame mucho la atención y luego me encante, que puede pasar. De momento no está en mi lista de lectura, así que supongo que, si lo leo, será más adelante.

Aquí llega la magnífica historia de cómo conseguí "El porpósito de Ana", de Álvaro García Hernández. Para el instituto nos mandaron leer TQMC, un libro bastante reconocido entre los españoles. Con una excepción: yo. No tenía ni idea del libro y no lo había leído nunca. Lo leí y no me dio tiempo a terminármelo (lo siento, Álvaro) y, como conclusión, dije que no me gustaba. Luego me contaron la historia entera y no estuvo para nada mal, pero bueno. Llegó el día en el que venía el autor del libro a hacer una conferencia a mi curso. Era muy gracioso; no me lo esperaba para nada así. Yo siempre he pensado que los escritores así más "reconocidos" eran altivos y ese tipo de cosas, pero para nada. Al menos él. Nos contó historias un tanto...negativas sobre Blue Jeans (el cual ya no me gustaba, y desde ese momento menos) y sobre otros escritores altivos que él había conocido al largo de su carrera como profesor de castellano y escritor para jóvenes adultos. Llegó el turno de preguntas, y comentó que las tres mejores preguntas se llevarían un ejemplar de su último libro El propósito de Ana. Hice una pregunta bastante normalilla (¿Qué consejo le darías a alguien que está empezando a escribir?), me contestó (Aprende a borrar y a editar tu historia) y me dió el libro. Me sentí muy fan de este hombre, y le debo mil gracias por ese consejo, ya que me ayudó con la novela que había estado escribiendo. Está por leer, y como no suelen gustarme mucho los libros sin segundas partes, quizá lo deje para un poco más adelante.

Llegamos a la columna de la derecha con un libro de otro autor español. El libro se llama "Las historias de terror del libro rojo de David" y es de Jose María Plaza. Me lo leo a trozos, una vez cada medio año o por ahí, y nunca me lo he acabado. Es como un añexo de otra saga que ha escrito, llamada Los Sin Miedo. Uno de los co-protagonistas, David, se ve que consigue un libro rojo de historias de miedo o algo (sólo me he leído los dos primeros tomos de la saga, y no he llegado a esa parte). Siempre intento leérmelo del todo, pero me es imposible, hay demasiado yuyu. Algún día me lo leeré entero, lo prometo.

 





Y, obviando los dos libros que ya enseñé en la otra entrada, terminamos con “Buscando a Alaska” de John Green. Antes de empezar a leerme este, me leí “Bajo la misma estrella” y “Ciudades de papel”. ¿Qué ha pasado? Que me gustó mucho Bajo la misma estrella, pero cuando me leí Ciudades de papel, fue alucinante. Es uno de mis libros favoritos de autores no-españoles, y por eso cogí tantas expectativas para leerme Buscando a Alaska. Reacción: Lento, mismo esquema...Conclusión: No me gusta y dejo de leerlo. La tengo a mitad, pero no me urge seguir leyendo, ya que me intuyo el final.







 No he enseñado muchos, pero es porque son los más juveniles que tengo, porque el resto son más infantiles o eran para clase. En la habitación de los libros (que la compartimos mi familia y yo) hay muchos más, aunque normalmente son los de mis padres. He de reconocer que, pese a tener muchísimos libros en papel por leer, me estoy acostumbrando fácilmente a las nuevas tecnologías. Pero nadie quita al olor magnifico a libro recién comprado, el tacto de las páginas, la pequeña emoción de sentir la portada de un libro precioso entre tus manos... Simplemente es un pequeño lujo que yo no me puedo permitir cada vez que quiero leer.
Feliz lectura,
Eva.

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